El artista sobre esta obra
En mi jardín, justo fuera de las ventanas de mi habitación, hay un gran cerezo. Tiene un tronco grueso pero rara vez da muchas cerezas. Una vez, mi abuela sugirió cortarlo. Pensaba que no era muy útil, y que daba sombra a la casa, privándola de la luz del sol.
Me opuse, diciendo, "¡Nadie lo hace así! ¿Quién cortaría un árbol tan hermoso, especialmente cuando cumple un propósito tan importante?"
Perpleja, mi abuela preguntó, "¿Qué propósito cumple?"
"¡Es donde tu bisnieta se sube a leer libros!" respondí.
Con convicción, ella afirmó, "¡Nadie lo hace así!" Y eso resolvió nuestra discusión. El cerezo todavía se mantiene en pie hoy en día, adornando el jardín con su presencia.
Me opuse, diciendo, "¡Nadie lo hace así! ¿Quién cortaría un árbol tan hermoso, especialmente cuando cumple un propósito tan importante?"
Perpleja, mi abuela preguntó, "¿Qué propósito cumple?"
"¡Es donde tu bisnieta se sube a leer libros!" respondí.
Con convicción, ella afirmó, "¡Nadie lo hace así!" Y eso resolvió nuestra discusión. El cerezo todavía se mantiene en pie hoy en día, adornando el jardín con su presencia.