El artista sobre esta obra
"Los Vivos y los Muertos" es una instalación que representa un mensaje visual monumental de 280 por 280 centímetros. Imita una losa de granito con óvalos cerámicos que parecen lápidas, mostrando los rostros de los residentes del pueblo de Olshanka.
La instalación crea una sensación de conexión temporal, donde el pasado y el presente se fusionan en uno. Cada óvalo es una historia separada intrínsecamente ligada al pueblo. Ocho óvalos blancos vacíos quedan en la parte inferior, simbolizando a los residentes actuales de Olshanka. Estos óvalos sin rellenar están destinados a las futuras imágenes de lápidas, indicando el ciclo inevitable de la vida y la muerte. Según la intención del artista, cuando todos los óvalos blancos estén llenos, la historia del pueblo de Olshanka llegará a su fin. "Los Vivos y los Muertos" es una obra de arte que nos invita a contemplar el tiempo, la memoria y la transitoriedad de la vida humana dentro del contexto de una pequeña comunidad.
La instalación crea una sensación de conexión temporal, donde el pasado y el presente se fusionan en uno. Cada óvalo es una historia separada intrínsecamente ligada al pueblo. Ocho óvalos blancos vacíos quedan en la parte inferior, simbolizando a los residentes actuales de Olshanka. Estos óvalos sin rellenar están destinados a las futuras imágenes de lápidas, indicando el ciclo inevitable de la vida y la muerte. Según la intención del artista, cuando todos los óvalos blancos estén llenos, la historia del pueblo de Olshanka llegará a su fin. "Los Vivos y los Muertos" es una obra de arte que nos invita a contemplar el tiempo, la memoria y la transitoriedad de la vida humana dentro del contexto de una pequeña comunidad.